Miércoles 27 septiembre 2023
Gratacós ha vuelto a pisar la principal pasarela de la moda española al protagonizar algunos de los looks más representativos de los diseñadores que participaron en la pasada edición de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid. En cada edición sentimos admiración y un profundo respeto por los creadores que confían en nosotros y convierten cada tejido en una creación única y singular, adaptada al lenguaje y los códigos estéticos de cada marca. En esta última edición de la pasarela madrileña, damos gracias a Aurelia Gil, Fely Campo, Hannibal Laguna, JC Pajares, Mans, Paloma Suárez, Teté by Odette y Yñesuelves por haber confiado en nosotros. A continuación, os mostramos un breve resumen de las colecciones de la próxima Primavera-Verano 2024.”
Aurelia Gil
Aurelia Gil regresó a la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid por segundo año consecutivo. En esta ocasión, la diseñadora de Las Palmas de Gran Canaria presentó su nueva colección ‘Tiempo’, que representa un hito en su esfuerzo constante por crear moda consciente y sostenible. Para comprender el trabajo de Aurelia Gil, es necesario conocer su pasión por la artesanía, que se aprecia en cada una de las piezas, la cuidadosa selección de tejidos y la feminidad etérea que impregna en cada silueta, con un resultado exquisito en todos los sentidos.
Si nos adentramos en la nueva colección, en ‘Tiempo’ abundan las siluetas y líneas relajadas, así como las flores, que en esta ocasión se presentan desde la estampación de pañuelos hasta en tejidos sorprendentes como sedas, tules y algodones. Tampoco faltan los elementos de crochet, los bordados y los guiños estampados en lurex.
Fely Campo
Fely Campo viajó creativamente a Cuba para llevar a cabo un ejercicio de hedonismo, libertad, opulencia, nostalgia y glamour. La colección presentada se llama ‘Zigurat’ y consta de 25 looks que se impregnan de la estética Art Decó a través de patrones puros, los cuales se construyen con la limpieza y sobriedad de los edificios más caprichosos de La Habana. Las siluetas y los cortes geométricos se entrelazan con tejidos inspirados en el lenguaje ornamental: brocados inundados de juegos visuales 3D con motivos naturales y geométricos; mosaicos orgánicos que contrastan con la verticalidad de las líneas del otomán y los tweeds más audaces. Frente a la calma voluminosa de los tafetanes, emergen las formas sinuosas de los rasos en movimiento. La paleta cromática se impregna de tonos fluorescentes, acabados en lamé y metalizados. Un paisaje de colores vivos sobre las tonalidades en blanco roto que se ven envueltas y penetradas por adornos con brillos iridiscentes y reflejos vidriosos.
JP Pajares
JP Pajares presentó en la pasarela madrileña su cuarta colección anual, donde prendas de verano, invierno y atemporales se combinan a través de diseños con toques artesanales, innovadores y respetuosos con el medio ambiente. Así, la propuesta ‘Annual’ sigue la estela de las últimas colecciones de la marca con el nuevo lujo artesanal y se destaca como una de las colecciones más especiales gracias a la nueva colaboración con artesanos de Castilla-La Mancha. Esta unión continúa reviviendo y aportando nuevos códigos estéticos a técnicas centenarias que están al borde de desaparecer.
En ‘Annual’, nada se deja al azar y cada detalle cuenta: encaje de bolillos, cerámica, vidrio soplado, bordados a mano, piel, croché, estampados pintados a mano y tejidos realizados en telares centenarios se entrelazan en una colección que consolida el carácter, el estilo y la identidad de la marca. Patrones innovadores y sofisticados, siluetas sensuales y oversize, plumas, pliegues y recortes se materializan en propuestas tanto para el día como para la noche, gracias a tejidos como lana, seda, crepé de seda, algodón, tafetán, denim, tul, tejidos técnicos y neopreno, entre otros. La colección sigue un recorrido cromático desde el negro hasta el blanco, pasando por tonos tierra y los colores sólidos más característicos de la marca.
Mans
Mans cree en la elegancia y sofisticación de las piezas clásicas, pero ofrece una visión más amplia de la moda a través de colecciones que se liberan de las limitaciones estéticas, permitiendo que cada persona pueda expresarse con libertad, fluidez y confianza. En esta ocasión, la firma del director creativo Jaime Álvarez, que apuesta por una sastrería impecable y exuberante, presentó su primera colección femenina manteniendo los códigos estéticos que utiliza para la línea masculina.
La colección se estructura con una primera serie de prendas de sastrería femenina que incluye americanas estilo smoking y pantalones estrechos que alargan la silueta femenina. También se incluyen faldas lápiz para mantener la esencia sartorial de nuestra firma. Con tonalidades como el gris marengo, negro y tonos perla para las blusas amplias que parecen etéreas, se crea una colección sobria que evoluciona hacia los años 60 en cuanto a vestidos rectos depurados, algunos por encima de la rodilla, otros de longitud midi y otros que rozan el suelo. Todos comparten colores vibrantes y tejidos variados como tafetanes, tejidos técnicos y adornados con lentejuelas con efecto “piel de cuervo”. El desfile de la colección femenina de Mans culminó con una novia completamente embellecida y velada con tul de seda de más de 5 metros.
Odette Álvarez
Teté by Odette, la marca de la diseñadora cántabra Odette Álvarez, encuentra en Venecia la inspiración perfecta para vestir a la mujer en la próxima temporada SS24. La influencia del mundo del cine, el glamour de la ciudad de los puentes y los canales, la exuberancia de los carnavales, el amor y las experiencias personales de la diseñadora se condensan en la colección ‘Venezia’.
Esta propuesta se caracteriza por tejidos ricos en adornos y abalorios, elementos y siluetas que evocan el vestuario típico veneciano, y una paleta de colores vibrantes que incluye tonos verdes acuáticos, rosa y la clásica combinación blanco y negro, reinterpretados desde una perspectiva contemporánea. En cuanto a los tejidos y materiales, se destacan los lujosos tafetanes, las sedas y el lúrex, junto a tejidos más urbanos como el denim o el punto de seda elástico. Además, no faltan las lentejuelas, los cristales y la pedrería, elementos distintivos de la marca. El estampado de rayas marineras en lino con detalles de micro lentejuelas se transforma en vestidos de fiesta y novia, cerrando una colección cargada de simbolismo y tradición. Se trata de una colección emocional compuesta por “prendas fáciles de llevar y difíciles de olvidar”.
Paloma Suárez
Paloma Suárez presentó su nueva colección ‘Glow Up’ para la próxima temporada de verano, partiendo de una premisa que aborda con frecuencia la creativa canaria: ‘¿Qué le dirías a tu yo del pasado?’. Con el objetivo de alcanzar la mejor versión de sí misma, la diseñadora, considerada una de las grandes promesas de la moda española, ha evolucionado sus códigos estéticos, dándoles una nueva interpretación. La propuesta representa una reflexión sobre el pasado para narrar de manera gradual el crecimiento personal y creativo de Paloma Suárez que la ha llevado hasta el presente. En la colección, destacan la incorporación de colores suaves y las prendas de longitud midi, manteniendo el protagonismo de los colores y texturas que son tan característicos de la firma y que se han convertido en su sello distintivo.
Ynés Suelves
Por último, María Osorio e Ynés Suelves, madre e hija, reflejan la mágica unión entre la moda y la pintura. En su nueva colección, la marca ha explorado al máximo los textiles, centrándose en el movimiento de sus prendas y buscando transmitir emociones a través del color. En esta colección para el próximo verano, la firma española ha apostado por una silueta más femenina que nunca y se ha caracterizado por una rica variedad de texturas. A diferencia de otras ocasiones, esta colección está repleta de diferentes tejidos y estampados.
Fotos: Mercedes Benz Fashion Week Madrid.
Viernes 15 septiembre 2023
Septiembre marca el comienzo de una nueva etapa y representa un mes crucial en la industria de la moda. En Gratacós, estamos entusiasmados por enseñaros nuestra colección Otoño Invierno 2023-2024.
Siguiendo la tendencia de los últimos años y en un mercado mundial más estable, en Gratacós dirigimos todos nuestros esfuerzos en crear colecciones de tejidos que integren los tres pilares fundamentales de nuestra empresa: creatividad, innovación y sostenibilidad. Como empresa familiar de abasto global, también ponemos un énfasis especial en la calidad del producto, ofreciendo artículos impecables y comprometiéndonos activamente con la protección del medio ambiente. Además, escuchamos atentamente las preferencias de nuestros clientes, quienes influyen en nuestras decisiones, sin dejar de lado nuestra propia interpretación de las tendencias globales, que luego el departamento creativo refleja libremente en cada tejido que compone nuestra nueva propuesta.
A continuación, os destacamos algunos aspectos concretos que definen la actual colección Otoño-Invierno 2023-2024 que ya está disponible en la tienda física y online.
Estampados
Nuestra manera de entender la moda se caracteriza en una expresión de libre albedrío donde los estampados se mezclan en un caos controlado creando tejidos únicos y sorprendentes. En materia de diseño, hay tres grandes líneas que nos inspiran: las flores; los elementos gráficos y, por último, los motivos de inspiración oriental.
El encanto de la naturaleza y la delicadeza de las flores se trasladan al invierno a través de estampados vegetales reinventados. La exuberancia de temporadas anteriores se mantiene, pero los diseños se adaptan a la estación fría: las flores se reducen en tamaño, pero la paleta de colores se despliega en toda su amplitud. No es una temporada para pasar desapercibida en términos cromáticos.
Los estampados gráficos también retoman su protagonismo. En esta temporada, se recoge la herencia de la anterior y se permite la expresión de todo tipo de geometrías con efectos de caleidoscopio. Los diseños abstractos se entrelazan con otras fantasías en una mezcla inesperada de patrones y formas. Es nuestra forma de aventurarnos en un territorio sin restricciones, liberando la creatividad y experimentando con combinaciones sorprendentes.
Por último, en la nueva colección, realizamos un viaje creativo hacia la exótica influencia de Oriente. Por ello, apostamos por exhibir ciertos elementos étnicos en nuestros productos, evocando la riqueza de las culturas del mundo mediante patrones tribales, estampados evocadores y colores vibrantes. Además, el Paisley, con sus icónicas formas curvilíneas, añade un toque de misticismo y elegancia a nuestros tejidos.
Fantasías
Con su poder evocador, las fantasías son elementos imprescindibles para que nuestra colección conecte con los sueños y las aspiraciones de nuestros clientes. En esta sección, destacamos dos tendencias que sobresalen en los tejidos más fantásticos: los tejidos en red adornados con lentejuelas y los tules bordados con motivos florales, que crean transparencias de una sofisticación única.
Los tejidos en red con lentejuelas han llegado para quedarse, consolidándose como una tendencia de moda que destaca por su versatilidad, contemporaneidad y elegancia. Estos tejidos fusionan la ligereza de las redes con el deslumbrante brillo de las lentejuelas, creando un efecto de destello que captura la atención al instante.
Las lentejuelas continúan siendo esenciales para destacar con estilo. En esta colección, se presentan en diferentes tamaños y se combinan con otros tejidos como el tweed, el algodón o el falso denim, entre otros. A los colores tradicionales del invierno, como el negro, el azul noche o el espectro completo de tonos metalizados, se suman colores llamativos como el rosa Barbie o el verde manzana, que no son tan típicos de la temporada.
Por otro lado, la delicadeza que aportan los tules bordados con motivos florales sigue siendo uno de los puntos fuertes de nuestra colección de fantasía. Estos tejidos son ideales para crear juegos de transparencias insólitos, permitiendo que el tejido se muestre en todo su esplendor sobre la piel, revelando todos los detalles de la maestría textil. Son especialmente efectivos para confeccionar prendas etéreas y elegantes a la vez.
Jacquards
Los Jacquards coloridos son una característica distintiva de Gratacós. En esta colección, hemos dado vida a una amplia variedad de diseños que abarcan desde motivos florales y geométricos hasta detalles figurativos, creando artículos únicos y distintivos que se destacan por su elegancia innata.
En esta temporada, hemos optado por diseños ornamentales inspirados en el estilo barroco, así como otros de inspiración orgánica. También hemos incorporado acabados con lentejuelas, gofrados de tacto sublime, suaves relieves y cuadros con urdimbres multicolores. En cuanto a la paleta de colores, hemos abarcado prácticamente todas las tonalidades, aunque hemos puesto especial énfasis en los verdes azulados, los lilas más audaces, los cálidos marrones y todas las variaciones del gris.
Desde Gratacós, te invitamos a descubrir los tejidos de la nueva temporada. En nuestro espacio en Barcelona, también puedes encontrar un pequeño adelanto de la colección del año que viene. ¡Te esperamos!
Retrato de Yayoi Kusama. Cortesía de Ota Fine Arts, Victoria Miro y David Zwirner © YAYOI KUSAMA. Foto: Yusuke Miyazaki.
Se la considera una leyenda viva, una revolucionaria que ha destacado en múltiples movimientos artísticos desde los años 60 hasta la actualidad, una artista visual admirada capaz de conectar el arte con la moda a través de sus universos singulares, plagados de geometrías. O más bien lunares, su rasgo más identificativo. Yayoi Kusama (Matsumoto, Nagano, 1929), sí la de carne y hueso -y no la figura robótica hiperrealista que le hizo Louis Vuitton en su última colaboración con la marca- es la absoluta protagonista de una de las exposiciones más visitadas en el Museo Guggenheim de Bilbao. Convertida en verdadero icono cultural a nivel global, en las últimas siete décadas, Yayoi Kusama se ha consagrado a su visión vanguardista con convicción, perfeccionando su visión estética, que es fiel reflejo de su filosofía vital. Como acostumbra a decir la propia artista: “¿Qué significa vivir una vida? Me pierdo en este pensamiento cada vez que creo una obra de arte”.
Esta exposición va más allá de una simple trayectoria. Busca centrarse en las cuestiones existenciales que impulsan las exploraciones creativas de la artista y escritora japonesa. A través de sus pinturas, dibujos, esculturas, instalaciones y material documental sobre sus performances, la muestra ofrece un análisis en profundidad de su práctica, desde los primeros dibujos que realizó siendo adolescente durante la Segunda Guerra Mundial hasta sus últimas instalaciones inmersivas con espejos.
Organizada siguiendo criterios cronológicos y temáticos, Yayoi Kusama: desde 1945 hasta hoy aborda los seis temas clave que atraviesan la vida de la artista: ‘Infinito’, ‘Acumulación’, ‘Conectividad radical’, ‘Lo biocósmico’, ‘Muerte’ y ‘La energía de la vida’. Estos temas interrelacionados aparecen y evolucionan dentro del universo obsesivo de Kusama, quien lleva décadas agitando la escena artística y la sociedad para favorecer la “sanación de toda la humanidad”.
Yayoi Kusama. Sala de espejos del infinito – Un deseo de felicidad humana llamando desde más allá del Universo (Infinity Mirrored Room – A Wish for Human Happiness Calling from Beyond the Universe, 2020. Espejos, madera, sistema de iluminación LED, metal, panel acrílico. 293,7 × 417 × 417 cm. ©YAYOI KUSAMA. Cortesía de Ota Fine Arts.
Algunas claves para entender a Yayoi Kusama
Autoretrato
El trabajo de Kusama se fundamenta en la auto-afirmación, la auto-destrucción, la auto-promoción, la auto-invención, lo auto-referencial y el autorretrato, incluso en aquellas creaciones donde la representación de su propia imagen resulta menos explícita. Esta sala reúne algunas de las pinturas y dibujos realizados por Kusama dentro del género del autorretrato, que ocupa un lugar destacado en su producción.
Esta sección comienza con Autorretrato (1950), un cuadro oscuro donde un girasol de un tono rosa carne flota sobre una boca humana, y es una de las primeras obras que recibió ese título; preside el espacio su Retrato (2015), en el que Kusama dispone algunos de sus característicos motivos —lunares, calabazas, redes y formas tentaculares— en una composición construida como un collage y dominada por una hierática figura.
Infinito
Kusama creció en un vivero de semillas rodeada de inmensos campos de flores. Sin embargo, en 1957 mientras sobrevolaba el Pacífico durante su primer vuelo a EE. UU., la visión del océano le inspiró sus bien conocidas pinturas de Redes de infinito. En esta serie, los lienzos están totalmente cubiertos, de manera obsesiva, de minúsculos arcos pintados en un rápido gesto, creando un patrón expresionista de redes y puntos interconectados. La pincelada libre contrasta con la reiteración del motivo, que impide identificar el inicio y el fin de este universo sin jerarquías, cuyas dimensiones fueron ampliándose dentro de la producción de Kusama hasta lograr que el público se viera inmerso en la infinitud de sus instalaciones.
Acumulación
En el arte de Kusama, el concepto de acumulación no es simplemente una tendencia obsesiva y compulsiva, ni un deseo innato de reiteración, sino que puede interpretarse como un afán de expansión impulsado por la necesidad de la artista de ampliar su visión creativa.
Tras crear las’ Redes de infinito’, Kusama desarrolló ‘Acumulación’, una serie de collages realizados con fragmentos reutilizados de papel y esculturas blandas de formas reiterativas. En estas piezas, un objeto cotidiano, como una silla, queda transformado al acumular sobre él gran cantidad de formas fálicas y tubulares de tela rellena y cosida, que hacen desaparecer el propio objeto y su función. Poco a poco, el deseo compulsivo de multiplicar estas formas blandas llevó a Kusama a expandir su visión a las habitaciones de espejos del infinito, que comenzó en 1965, y a las telas plateadas o estampadas que realiza durante los años setenta y ochenta, como ‘Acumulación de manos’, donde un sofá y unas sillas están cubiertos de cientos de guantes plateados.
Yayoi Kusama. Auto-obliteración (Self-Obliteration), 1966–1974. Pintura sobre maniquíes, mesa, sillas, pelucas, bolso, tazas, platos, cenicero, jarra, plantas de plástico, flores de plástico, frutas de plástico. Dimensiones variables. M+, Hong Kong. © YAYOI KUSAMA
Conectividad radical
A finales de la década de 1960, la lucha en favor de los derechos civiles y contra la guerra de Vietnam genera una atmósfera de contracultura en la que Kusama desarrolla una práctica centrada en la acción pública y la performance. La artista denuncia los estereotipos de raza y género, critica la política belicista estadounidense y atrae la atención de los medios con sus provocadores happenings, especialmente los protagonizados por cuerpos desnudos cubiertos con lunares, que son actos de “auto-obliteración”.
Este es un concepto fundamental en la filosofía de Kusama, que representa la liberación del yo como forma de sanación grupal y que conecta profundamente a las personas, especialmente quienes viven en los márgenes de la sociedad. La artista japonesa recurre al poder de los medios para difundir su filosofía e intensificar su visibilidad y notoriedad.
Biocósmico
¿De dónde nace su obsesión por los lunares? Yayoi Kusama nos da la respuesta: “Nuestra tierra es solo un lunar entre los millones de estrellas del cosmos. Los lunares son un camino al infinito. Borramos la naturaleza y nuestros cuerpos con lunares, nos integramos en la unidad de nuestro entorno.”
Su infancia cerca del vivero de plantas de su familia hizo que la artista japonesa sintiera un profundo vínculo con la vida orgánica, que la artista considera que está conectada con la dimensión y el espacio del cosmos. ‘Lo Biocósmico’ expresa su creencia de que lo terrenal y lo celestial son lo mismo. De niña comienza a observar la anatomía de las plantas, sus ciclos de vida y la unión entre el cielo y la tierra. Tal vez la imagen de lo biocósmico más constante en su obra sea la de sus distintivas calabazas, de superficies caprichosamente onduladas y moteadas, que Kusama identifica con un espíritu vegetal benévolo y como reflejo de su propia alma. Su postura respecto a la naturaleza ilustra cómo Kusama expresa su alienación del mundo y su necesidad expansiva de entrar en comunión con el cosmos.
Yayoi Kusama. Calabazas (Pumpkins), 1998–2000. Técnica mixta. 6 piezas, dimensiones variables © YAYOI KUSAMA
Muerte
“Lo que la muerte significa, sus colores y su especial belleza, la quietud de sus pisadas y la ‘nada’ después de la muerte. Ahora me encuentro en una fase en la que creo arte para el reposo de mi alma, aceptando todo esto”, asegura Kusama en la exposición del Guggenheim de Bilbao.
El trabajo de Kusama transcurre constantemente en el umbral entre la vida y la muerte. Una niñez rodeada de la efímera existencia de las plantas en el vivero familiar, la adolescencia marcada por la guerra y sus consecuencias, y especialmente la muerte de su padre y de su amigo íntimo Joseph Cornell a mediados de los años setenta, llevaron a la artista a considerar que la muerte no es el punto final, sino otra fase de la existencia que puede dar origen a una nueva. En ocasiones, en su lucha creativa y en medio de la desesperación, Kusama anhela liberarse de lo que describe como el “lánguido peso de la vida”. Sin embargo, a través de su práctica artística y literaria transforma ese deseo en una suerte de fantasía terapéutica, en una recompensa espiritual en la “solemne belleza” de la muerte y en la pérdida del ego como retorno a la eternidad.
La fuerza de la vida
Hacia 1988, el arte y la psique de Kusama experimentan un cambio importante. Con la llegada del ansiado y merecido reconocimiento público, tanto de sus exposiciones internacionales como de sus publicaciones, elogiadas en los círculos literarios de la vanguardia, el poder sanador del arte y la celebración de la vida se convierten en los temas centrales de su producción. Como afirmó en 1999, Kusama llegó a creer que su función consistía en transformar su sufrimiento a través del arte “para la sanación de toda la humanidad”. En el nuevo milenio, la artista japonesa quiere amplificar este mensaje. Por ello, las coloridas pinturas y esculturas de una de sus últimas series, Mi alma eterna (2009–) y Ruego todos los días por el amor (2021–hoy), suponen, tal vez, la culminación de este compromiso.
La exposición “Yayoi Kusama: desde 1945 hasta hoy” permanecerá abierta al público hasta el próximo 8 de octubre.
Neus Bermejo con vestido aguamarina del diseñador Mariano Moreno. Foto: Cortesía de Mariano Moreno
Nadie duda de que el color del año es el rosa Barbie, una transformación más llamativa del rosa Millennial que hemos estado viendo en la última década. Se asemeja al rosa chicle o al rosa plástico, todos ellos con matices más artificiales. Sin embargo, más allá del fucsia y del rosa suave que dominan la tendencia Barbiecore, otros colores están emergiendo esta temporada. Uno de ellos es el verde agua, que cautiva con su encanto discreto y su naturaleza calmante y refrescante.
El verde agua, también conocido como verdeazulado o aguamarina, nos sumerge en las fascinantes aguas transparentes, cálidas y poco profundas, evocando emociones y transmitiendo sutiles mensajes asociados al verano. Playas tropicales paradisíacas, lagunas rodeadas de naturaleza y lechos de ríos con aguas cristalinas son algunas de las imágenes que vienen a la mente al contemplar esta tonalidad pura. Es perfecta para el verano, ya que está íntimamente ligada al mar y a la naturaleza.
El nombre hace la cosa
Este color recibe su nombre de la piedra preciosa que lo representa, la aguamarina. Una gema que se caracteriza por su hermoso tono verde azulado claro. El término “aguamarina” proviene del latín “aqua marina”, que significa “agua de mar” para evocar de manera poética los destellos y la transparencia del agua.
Desde la antigüedad, el color aguamarina ha sido apreciado por su belleza y su conexión con la naturaleza acuática. Los antiguos romanos atribuían a esta piedra poderes protectores y curativos. Además, en la tradición cristiana, el aguamarina se asociaba con la pureza y la inocencia. A lo largo de los siglos, ha sido utilizado en joyería, especialmente en piedras preciosas, pero también en cerámica y ornamentación en diferentes culturas, desde los antiguos egipcios hasta los nativos americanos.
Propiedades psicológicas y sensoriales
A nivel sensorial, el verde agua es una tonalidad refrescante y calmante para la vista. Tiene una cualidad luminosa y translúcida que evoca sensaciones de serenidad y frescura. No es sorprendente que este tono esté asociado con la paz, la claridad mental y la armonía, características valiosas en el ámbito de la moda, la publicidad y el diseño de interiores cuando se busca crear un ambiente sereno y acogedor. Además, su presencia puede estimular la creatividad y promover una sensación de relajación.
A este color también se le atribuyen cualidades que fomentan la apertura emocional y la capacidad de expresión. Su tono suave y luminoso lo convierte en una elección popular para aquellos que desean transmitir una imagen fresca, sofisticada y elegante. Además, se relaciona con la juventud, ya que sus tonalidades infunden confianza y magia, haciendo que las personas se sientan renovadas tanto por dentro como por fuera, con energías positivas.
Un ejemplo notable de marca que ha adoptado el color aguamarina en su identidad es Tiffany&Co. Su icónico tono de azul aguamarina se utiliza en su empaque y presentación, aportando una dualidad entre elegancia y frescura desenfadada. Asimismo, la reconocida marca de ropa deportiva Nike ha incorporado el color aguamarina en sus últimas colecciones de calzado y prendas deportivas, brindando un aspecto fresco y enérgico a sus productos.
Sin ser primordial, destaca
No nos engañemos. Es cierto que el aguamarina no ha sido un color de front row en las pasarelas de moda, al menos hasta ahora. No suele ser el favorito de los diseñadores y no abunda en las colecciones, ya que su naturaleza relajante resulta incompatible con los ritmos frenéticos de la industria. Sin embargo, es cierto que este color se encuentra con mayor facilidad en las colecciones primavera-verano, ya que remite a las aguas cristalinas en días soleados y evoca los destinos paradisíacos. Además, favorece el bronceado de la piel al ser un tono suave que le cede protagonismo.
A pesar de esto, diseñadores reconocidos han abrazado el aguamarina en sus creaciones. Por ejemplo, el diseñador italiano Roberto Cavalli ha utilizado este color en sus estampados y diseños de alta costura, aportando un toque de sofisticación y frescura. Marcas como Versace, Gucci y Carolina Herrera también han incorporado esta tonalidad en sus colecciones, tanto en prendas como en accesorios.
Este verano, a través de la tendencia mermaidcore, el aguamarina ha ganado mayor presencia. En este sentido, el color de las aguas cristalinas se ha mostrado en total looks que Max Mara ha explorado con diseños tipo bañadores de estilo retro, incluyendo gorros. Fendi también ha optado por esta tonalidad, combinando pantalones con camisetas sin mangas estampadas. Por su parte, Armani ha presentado una propuesta más sutil, con un vestido palabra de honor combinado con pantalones.
Aunque el aguamarina puede no ser el protagonista habitual en la moda, no podemos negar su encanto y versatilidad. Su presencia en las colecciones de diseñadores reconocidos y su asociación con la frescura y sofisticación lo convierten en un color atractivo y elegante.
Desde Gratacós, nos unimos al encanto del color aguamarina. En nuestra tienda online, ofrecemos una selección de tejidos de temporada teñidos con este refrescante color, que aporta vitalidad y sofisticación. Cuando disfrutemos de nuestras merecidas vacaciones, veremos la vida con un toque de color aguamarina.
Fotos: The 2nd Skin y Max Mara
‘La Sirenita’ está de moda, con perdón de la muñeca Barbie y su estilo barbicore. Y no solo su esperado remake, estrenado el pasado 26 de mayo en cines, ha ganado una legión de fans tanto entre niños como adultos. Ahora, la estética de estas criaturas mitológicas también ha seducido a la industria de la moda, que sorprende con la tendencia más popular del verano: el mermaidcore con diseños que nos transportan a las profundidades del océano.
Las pasarelas hablan
El interés de la moda por reflejar el fascinante mundo submarino no es nuevo. De hecho, se atribuye al diseñador francés Marcel Rochas la creación de la silueta de sirena en la década de 1930, la cual luego fue popularizada en círculos de moda por Jean Patou. Su vestido inspirado en el mundo acuático fue publicado en una edición de la revista Vogue en 1933. Desde entonces, el estilo sirena ha evolucionado en diversas formas y en la actualidad, diseñadores como Bottega Veneta o Bluemarine han reinterpretado la imagen de esta criatura mitológica ofreciendo su propia visión con prendas de ropa que se mueven entre la sofisticación y lo casual.
Indagando más en las colecciones actuales vemos que las grandes marcas siguen explorando el imaginario colectivo de las sirenas. Por ejemplo, para su colección Resort 2023, Alberta Ferretti hizo un guiño muy marcado a estas criaturas marinas al cerrar su colección con conjuntos de noche repletos de lentejuelas iridiscentes en color azul. En una línea similar, Gucci también reveló un vestido llamativo de brillos en tonos verdes y silueta fluida, que ya predecía el nuevo auge de la tendencia. O Tom Ford con una colección festiva repleta de lentejuelas y colores del mar, como el diseño cut-out en plata y verde que portó Gigi Hadid en un estilismo con el cabello rizado.
Lo curioso es que todo hace pensar que la tendencia mermaidcore se va a extender todo este 2023 hasta impregnar las próximas temporadas. Lejos de quedarse en el olvido, en otoño, la ropa con efecto de escamas y faldas con forma de cola de sirena también marca el diseño de Bottega Veneta. Además de los vestidos de noche de Roberto Cavalli, que mostró a las modelos de su pasarela con peinados ondulados de sutil efecto mojado y maquillaje de ojos ahumados. Y en 2024, las colecciones Resort siguen rescatando este entorno acuático como ya se ha visto en Louis Vuitton con faldas de lentejuelas que crean ilusiones ópticas.
Diseños de sirena made in Spain
Esta tendencia global también influye en los diseñadores españoles. Muchos de ellos han propuesto creaciones que se inspiran en las formas del mundo marino y siguen este código estético del mermaidcore. En la pasada edición del 080 Barcelona Fashion, Anel Yaos presentó una colección de carácter intimista que se sumerge en los fondos marinos para presentar sus señas de identidad, marcadas por el romanticismo, la fantasía y lo naif en piezas de ropa que no distinguen géneros. “Seres sin nombre ni apariencia, criaturas intangibles, mitos acuáticos me acompañan desde niño, suscitando en mí sensaciones que van de la tranquilidad al temor, y me recuerdan que no estoy solo”, afirmaba en el backstage de la pasarela catalana. La propuesta ‘Deep 23’ refleja la fluidez de tejidos ligeros como sedas, gasas y algodón, contrastando con la contundencia del terciopelo y el neopreno, a través de una fascinante combinación de estampados y colores que se ajustan armónicamente entre sí.
El diseñador sevillano investiga con nuevos materiales como el látex y la toalla, y continúa apostando por el upcycling de colchas, los botones vintage y elementos que evocan el océano, como redes de pesca y conchas. Además, cobran protagonismo los volantes, las flores en 3D y las superposiciones de encaje. La paleta de colores de la propuesta fluye entre tonos pastel y otros más intensos, como el verde musgo y el negro.
Otra marca que explora la sensualidad con propuestas femeninas cargadas de transparencias, lentejuelas, iridiscencias y encajes es Eiko Ai, liderada por la diseñadora barcelonesa Glò Lladó. La firma se sumerge en propuestas oníricas que se inspiran en la efímera belleza de los paisajes naturales. Según Lladó, “en esta ocasión su inspiración radica en el movimiento del agua y la fauna marina, como las medusas”. Con su colección ‘Underwater Life’, Eiko Ai busca establecer una conexión con la naturaleza acuática a través de elementos como plantas, animales y otros organismos, así como seres fantásticos que habitan en los océanos.
Para lograrlo, la firma barcelonesa utiliza transparencias que permiten el paso de la luz, suaves satenes en tonalidades brillantes, volantes, volúmenes y tejidos vaporosos y etéreos que capturan el movimiento de las olas del mar. Además, los tonos nacarados presentes en sus prendas emulan las escamas de las sirenas, completando así la inspiración marina de su colección.
Siguiendo de cerca las últimas tendencias, las grandes distribuidoras de moda no han querido perderse la oportunidad de mantener en la cresta de la ola, la estética de estas fascinantes criaturas marinas. Zara inauguró la nueva temporada con una editorial dedicada a las sirenas modernas, presentando prendas que han sido un éxito de ventas. Entre las propuestas se encuentran tops con lentejuelas, faldas de satén y un vestido plateado que realza la silueta femenina. En plena temporada de rebajas, el buque insignia de Inditex sigue apostando por los tejidos en red con pequeñas incrustaciones joya y las lentejuelas de distintos tamaños en tonos azules y metalizados.
En Gratacós también tenemos un surtido de tejidos brillantes que podrían seguir los perceptos de la tendencia mermaidcore. Encuentra nuestras lentejuelas más premium aquí con distintos tamaños, formas y espectaculares diseños multicolor.
Retrato de Josep Font. Foto: Javier Biosca. Cedida por el Museo Cristóbal Balenciaga
Josep Font lo tiene todo para ser una leyenda de la moda -una categoría que le sitúa en el firmamento de estrellas de la aguja cuyo legado perdura a lo largo de los siglos-. Talentoso, onírico, perfeccionista y discreto. De imagen inalcanzable, alma arquitectónica y trabajo persistente. Tras estar cinco años apartado del foco mediático una vez abandonó la dirección creativa de DelPozo, firma que recolocó sus cimientos para relanzarla al estrellato internacional, el modista catalán vuelve a estar en candelero. Eso sí, manteniendo su aura enigmática. Ya se sabe que Josep Font no le gusta alimentar su ego a golpe de titular.
Ahora, el Museo Cristóbal Balenciaga le dedica la primera retrospectiva a Josep Font. Será la primera centrada a un creativo más allá del maestro de Getaria en un nuevo ciclo que prepara la institución para mostrar al mundo como el talento de Balenciaga ha influido en la obra de creadores internacionales a nivel global.
La exposición ‘Josep Font. Belleza e inquietud’, es una producción del Museo Cristóbal Balenciaga, y comisariada por Josep Casamartina i Parasols – director de la Fundación Antoni de Montpalau, en estrecha colaboración con el creador en el que han trabajado mano a mano durante más de un año para que el resultado fuera sofisticado pero fugaz, sin un milímetro de margen de error y haciendo homenaje al lujo silencioso que tan bien sabe imprimir el creador catalán en sus diseños.
¿Y por qué Josep Font dialoga con Cristóbal Balenciaga en un mismo espacio? Según Casamartina, esta unión se propuso porque “la mirada del diseñador catalán hacia el modisto vasco no ha sido mimética sino una interpretación muy personal a partir del estudio del volumen tratado de forma autónoma e independiente de la anatomía femenina, alcanzando una sensualidad sublimada y silenciosa, tal como también entendía Balenciaga”. Simultáneamente, Josep Font logró una gran perfección técnica y en el tratamiento simple y a la vez contundente de los tejidos, en la construcción arquitectónica y en la utilización de exquisitos bordados, también se acerca al legado del maestro de Getaria. Quizás como ningún otro diseñador español contemporáneo, Font encaja con el famoso concepto de Balenciaga: “un modisto debe ser arquitecto de la forma, pintor para el color, músico para la armonía y filosofo para la medida”.
Belleza e inquietud
El nombre hace la cosa. La muestra se articula a través de una premisa constante a lo largo de la trayectoria de Josep Font: “detrás la belleza siempre hay inquietud”. El diseñador catalán considera que la belleza, en todo su esplendor, produce inquietud e incluso desasosiego, per es quizás por ello que genera, también, la energía para seguir alcanzándola sin parar. La construcción arquitectónica, el juego de volúmenes y la ornamentación de los tejidos son señas de identidad de su obra. Sin olvidar su búsqueda incesante de un ideal femenino muy personal y en constante evolución, lejos de las estridencias y las provocaciones. El estilo de Josep Font es elegante, refinado, pero también hipersensible y etéreo.
Partiendo de esta idea, la exposición propone un discurso estético ágil que repasa cronológicamente los 30 años de trayectoria, desde los comienzos en las pasarelas de Gaudí y Cibeles pasando por los desfiles en París, la alta costura y finalmente al frente Delpozo, la cúspide de su carrera. Está compuesta por 54 piezas de indumentaria, entre abrigos, conjuntos de calle, cóctel, noche y novia; procedentes de la Fundació Antoni de Montpalau -que tiene el principal fondo de piezas del diseñador catalán- y de diversas colecciones particulares españolas y norteamericanas. El conjunto reúne, asimismo, algunos complementos de las dos marcas, como zapatos, perfumes y tocados. Más allá de las creaciones, el recorrido incluye fotografías emblemáticas de Joseph Hunwick, Javier Biosca y Ernesto Artillo, además de una entrevista realizada al creador por el Museo Victoria & Albert de Londres.
Vestido Delpozo de Josep Font. Foto: Alex Iturralde. Cedida por el Museo Cristóbal Balenciaga
Esta antología abraza en especial la obra de Font realizada en las dos primeras décadas del siglo XXI y se estructura a través de tres grandes períodos clave:
De los inicios a la consolidación
Josep Font (Santa Perpètua de Mogoda, 1965) estudió Arquitectura en la Universidad Politècnica de Catalunya y se graduó en Diseño de Moda por la Escola de Disseny i Moda Felicidad Duce, en Barcelona. Con 21 años ganó el premio Air France Mode Prix y expuso en Les Arts Décoratifs. El joven diseñador consolidó su propia marca con Luz Díaz en 1987, aunque hacía años que ya gozaban de un buen reconocimiento en el mundo de la moda. Juntos crearon un lenguaje propio. Una estética de colores sobrios, austera y depurada. Su inspiración nacía de la indumentaria popular cotidiana, con el uso de materias naturales, seda, lana y algodón, y un patronaje estudiado y severo. Sin embargo, en 1995, Font decidió seguir su carrera en solitario y a finales de esta década evolucionó hacia un mundo mágico e hipersensible, de coloraciones más amplias, tejidos lujosos y refinados, bordados espectaculares y atrevidos. Este giro en diseño le permitió alcanzar el éxito internacional a principios de los años 2.000. Llegaron años de expansión, de premios, tiendas y desfiles en Madrid, Barcelona y Tokio. Un proceso ascendente que culminó en tres colecciones de prêt-à-porter presentadas en París y otras cuatro de alta costura que triunfaran de manera absoluta en la capital francesa.
El relanzamiento de Delpozo
En este ascenso a la cima hubo un bache: Josep Font perdió su propia marca en 2011, aunque durante un año, el talentoso creador empezó a diseñar para otras firmas de forma anónima. Sin embargo, una oferta le entusiasmó especialmente: el encargo de remodelar y relanzar la firma del fallecido diseñador madrileña Jesús del Pozo. Font volvió a cimentar los pilares de la marca con una nueva denominación -se pasaría a llamar DelPozo- y una estructura y talleres actualizados en Madrid, Miami, Londres, Moscú y Dubai. En las nuevas colecciones DelPozo, se apreciaba, lo que Josep Font había iniciado en alta costura y crearía una nueva línea llamada prêt-à-couture impecable, con una rigurosa técnica y unos acabados exquisitos. Muy estilo Josep Font.
Madurez y reconocimiento internacional
Josep Font alcanzó su zenit en su etapa para Delpozo. Entre 2012-2018 creó 19 colecciones y en esta pletórica producción es donde se vislumbrará de forma más evidente la influencia de Cristóbal Balenciaga. En Delpozo el diseñador catalán alcanzará su madurez y el máximo reconocimiento a escala mundial mediante las colecciones que presentó en Madrid, Nueva York, París y Londres, y situó a la marca entre las favoritas de la alfombra roja y las celebridades como Care Blanchett, Julianne Moore, Keira Knightley o Zendaya, creando tendencia y marcando un hito en el mundo de la moda. De hecho, Josep Font se convirtió en el primer diseñador español invitado por Anna Wintour a la gala Met. Una efeméride que muestra la profunda admiración que sentían los principales gurús de la moda por el trabajo de este prodigio con la aguja.
De la última etapa de Josep Font poco se cuenta. Abandonó precipitadamente Delpozo al “desenamorarse del proyecto”. Igual que hizo Balenciaga en 1968 que prefirió dejarlo todo al ver que su idea de diseño nada tenía que ver con la democratización de la moda del momento-si ahora mismo levantara cabeza no sabemos lo que pensaría de su propia marca-. Hasta entonces, Josep Font ha seguido trabajando desde el más absoluto anonimato y el tiempo dirá si volverá al foco mediático con un nuevo resurgimiento de él mismo. Ahora de momento, su aplaudido talento vuelve a luz en esta fantástica exposición que se podrá visitar hasta el 7 de enero de 2024 en el Museo Cristóbal Balenciaga. Una magnífica alianza entre moda, arquitectura, coherencia e integridad.
Imágenes exposición ‘Josep Font. Belleza e inquietud’ de Ernest Artillo y Alex Iturralde. Cedidas por el Museo Cristóbal Balenciaga
“Lo quise muchísimo. Era un icono para mí”, asegura Gloria Casacuberta de Gratacós. La muerte de José Castro ha sido una noticia triste para la empresa familiar por su proximidad y vinculación con todo nuestro equipo. El diseñador de moda de origen gallego falleció este lunes en A Cañiza (Pontevedra), su pueblo natal, a los 52 años a causa de un cáncer. Una lamentable pérdida para uno de los modistos más talentosos y con más proyección internacional del país de la década de los 2.000. “Lo llamaba el Moschino español”, añade Casacuberta.
Una trayectoria exitosa
José Castro (A Cañiza, 1971-2023) se graduó en el prestigioso London Royal College of Art y fue miembro de la Federación Francesa de la Couture, un título que sólo han ostentado dos españoles: Paco Rabanne, fallecido el pasado mes de febrero, y Cristóbal Balenciaga.
Establecido en Barcelona desde muy joven, sus creaciones han desfilado por las pasarelas con más renombre del planeta. Castro creó su marca homónima en 2004, y saltó a la fama tres años más tarde. En 2007 su colección ‘Cuervos’, un oscuro a la vez radiante desfile en el Carrousel du Louvre de París, supuso la presentación en sociedad de su extravagante estilo, su arrolladora creatividad y su dominio en la aguja ante el público parisino. Lo siguieron otras colecciones igual de notorias como ‘Red Rum’, Dead Bird’, ‘Noitulove’, ‘Blue Sky’ y ‘Aurora’ que le permitieron distinguirse y posicionarse entre los diferentes medios internacionales gracias a su notorio trabajo con el volumen, los juegos de texturas y la creación de su color fetiche, más allá del negro: el color “Rosa Castro”, que dedicó a su madre. Además, José Castro también destacó por su destreza en el uso del tejido denim.
Durante su trayectoria, el diseñador gallego fue reconocido con el Royal College of Art Society Prize for Innovation (2000); el premio Barcelona es Moda al Professional (2007); el Novel Designer Prize de Marie Claire (2008-2009); o el premio L’Oréal a la mejor colección en la edición número 50 de la pasarela Cibeles Madrid Fashion Week (2009).
La impronta de José Castro también se reflejó en firmas como Desigual o Miró Jeans, de las que fue su director creativo. De su trayectoria, también destaca su colaboración con Alexander McQueen para Givenchy
La fama del diseñador gallego que marcó la primera década del siglo XX también traspasó fronteras y consiguió vestir a la entonces mejor embajadora de la moda internacional: Sarah Jessica Parker en su personaje de Carrie Bradshaw de la célebre serie ‘Sexo en Nueva York’. De José Castro son los vaqueros sin costuras pertenecientes a la colección ‘O Corvo’ (2008) que lucía la actriz en uno de los episodios y que le dieron una enorme visibilidad a nivel mundial. Hay que recordar que en esa época no había el impacto que pueden generar hoy en día redes sociales como Instagram o Tik Tok.
El diseñador también vistió a otras estrellas de la pantalla, como la actriz sevillana Paz Vega o Whoppi Goldberg. Revistas como Vogue, Marie Claire, Telva o Yo Dona han publicado su trabajo y alabado su trayectoria, y sus colecciones han sido portada en Le Monde, Love y Woman.
Una vinculación especial
En plena cúspide profesional, José Castro y Gratacós compartieron proyectos y se nutrieron de múltiples colaboraciones. Una de las más recordadas fue en Paris en la presentación de su segunda colección en 2007, donde el rosa fue el principal protagonista. El diseñador gallego presentó en la Sala Gabriel del Carrousel du Louvre la colección ‘Noitulove’, inspirada en las actrices de cine de los años 40, ante más de 400 personas y medios especializados.
La propuesta para el verano 2008 arrancó con un conjunto de pantalón y chaqueta rosa salpicada de apliques de flores de organza en el cuello y pecho, y siguió con varios modelos de chaquetas y faldas de piel arrugada y ceñidas, pantalones estilo años 80, vestidos de algodón con volúmenes y camisas de satén de seda natural con detalles de organza. Destacó el diseño del cierre: un vestido de novia cuajado de flores de organza en el que se utilizaron más de 150 metros de tela de Gratacós. Esta colaboración fue la primera en la que la empresa familiar decidió apostar por un diseñador en la pasarela. “La novia de rosa de José Castro no podía ser más bonita y espectacular”, recuerda Glòria Casacuberta de esta efeméride.
El modisto gallego también ideó dos escaparates de la tienda, cuando el espacio se situaba en el icónico Paseo de Gracia de Barcelona. “Recuerdo un escaparate hecho con elementos de reciclaje”, añade Casacuberta. Más allá de las colaboraciones con la empresa, Gratacós mantenía con José Castro un vínculo especial: “Fue una persona muy jovial, de alma despreocupada y siempre estaba de buen humor”, asegura Casacuberta.
Con estas palabras de agradecimiento a toda una vida dedicada a la moda, hoy decimos adiós a un gran genio de la aguja, que nos deja creaciones que mantendrán vivas su legado para la posteridad. Hasta siempre José Castro.
Fotos José Castro y Gratacós publicadas en el Facebook del diseñador
Diseño de Rahul Mishra de la colección “The Dawn”. Foto extraída en Facebook
La inspiración siempre llega en los lugares más inesperados, y más en el demandante mundo de la moda, que siempre busca novedades con las que sorprender a sus consumidores. Desde hace algún tiempo, hay un nuevo objeto de deseo que genera fascinación y repulsión a partes iguales: el moho. Sí, lo has leído bien. El moho, ese tipo de hongo microscópico que ayuda a la naturaleza a descomponer la materia orgánica muerta, está de moda por varios motivos.
No es de extrañar esta afirmación, porque en general, el mundo de los hongos seduce con su estética imperfecta. Lo hace a través de formas orgánicas y relieves naturales que inspiran a artistas y creadores. También conecta con un universo onírico y fantástico que llevamos en el subconsciente y que se puede revelar en forma de aventuras en el bosque, como se aprecia en libros como ‘Alicia en el País de las Maravillas’ o películas como ‘Fantasía’ de Disney. Los hongos también remiten a la fiebre psicodélica de la década de los 60 y 70, con sus propiedades alucinógenas que se transmitían en universos coloridos que impregnaban desde la moda hasta la música y la pintura.
Por último, el universo de las setas también tiene una dimensión sostenible. Gracias a sus propiedades sorprendentes y su versatilidad excepcional, los hongos han transformado el mundo de la moda al ofrecer una alternativa más consciente y respetuosa con el medio ambiente. Analizamos a continuación cada aspecto:
Diseño inspirado en los hongos de Rahul Mishra de la colección “The Dawn”. Foto extraída en Facebook
La belleza imperfecta
Es una evidencia: el moho, a primera vista, puede parecer repulsivo y desagradable. Sin embargo, los diseñadores de moda han encontrado en este organismo poco atractivo una belleza oculta que se manifiesta en sus colores pastel, sus relieves orgánicos y sus texturas inusuales. Estos atributos inusuales y únicos le dotan de cierta singularidad estética y, por lo tanto, una mayor capacidad para desafiar los cánones tradicionales de belleza. En un mundo que busca la perfección, la belleza encontrada en la abstracción del moho se convierte en una declaración audaz y liberadora, que atrapa al instante porque conecta con la naturaleza y los procesos de vida en un organismo que cuestiona y explora ideas sobre lo que es bello y bueno, y trata de reconciliarnos con la imperfección.
Un diseño arquitectónico de Iris Van Herpen. Foto extraída en Facebook
En el punto de mira de los diseñadores de vanguardia
Los diseñadores de moda han abrazado la estética innovadora de los materiales fúngicos y han creado piezas vanguardistas que desafían los límites de la creatividad. Así, los patrones abstractos y las manchas irregulares y aterciopeladas del moho se han traducido en impactantes estampados y bordados en prendas de vestir. Varios diseñadores han experimentado con técnicas de teñido y estampado para crear efectos similares a los del moho en sus colecciones. Además, las formas orgánicas del moho han influido en las siluetas y los cortes de las prendas, aportando una sensación de fluidez y movimiento.
Por ejemplo, Iris van Herpen ha explorado en numerosas ocasiones los relieves del moho en sus creaciones, así como el entramado subterráneo y las conexiones de los hongos. Sus diseños experimentales a menudo presentan estructuras tridimensionales que imitan las texturas y las formas únicas de estos pequeños organismos con gran capacidad regenerativa.
Por su parte, Rahul Mishra también destaca por su enfoque sostenible y su uso de técnicas artesanales. En sus colecciones, el diseñador hindú ha incorporado bordados y apliques que evocan los relieves del moho, creando efectos visuales interesantes y texturas sorprendentes. Conocido por su estética provocadora, Alexander McQueen ha explorado el mundo del moho en su icónica colección “Plato’s Atlantis”. Los relieves orgánicos del moho se tradujeron en estampados y texturas en sus prendas, aportando una sensación de misterio y surrealismo. Gareth Pugh también ha recurrido al moho como fuente de inspiración, creando prendas con volúmenes y texturas que evocan su estética distintiva. Además, la diseñadora francesa Marine Serre ha incorporado el moho en estampados y texturas en prendas de estética futurista y vanguardista.
La artista Dasha Plesen trabaja con la microbiología”. Foto extraída en Facebook
Aplicaciones en la industria de la belleza
En el sector de la belleza, que siempre está atento a las nuevas tendencias, los hongos también han emergido como una poderosa fuente de inspiración y se han convertido, a su vez, en elementos activos en productos de belleza, gracias a su increíble versatilidad y beneficios para la piel.
La cosmética ha sido uno de los campos más impactados por la incursión de los hongos. Estos organismos tienen propiedades hidratantes, antioxidantes, antiinflamatorias y regeneradoras, convirtiéndolos en ingredientes estrella en productos para el cuidado de la piel. Los hongos, como el reishi, shiitake y cordyceps, se utilizan en sueros, cremas y mascarillas para proporcionar beneficios notables, como mejorar la elasticidad de la piel, reducir los signos del envejecimiento y promover una tez radiante.
Además de sus beneficios para la piel, los hongos también han dejado su huella en el mundo de la perfumería. Algunas especies, como la trufa y el champiñón, tienen aromas característicos y sofisticados que se han utilizado para crear notas distintivas en perfumes y fragancias. Estos ingredientes fúngicos aportan una dimensión única y terrosa a las composiciones olfativas, agregando una sensación de misterio y elegancia a los productos perfumados.
La influencia de estos pequeños organismos vivos también se ha extendido al mundo del maquillaje creativo, donde los diseñadores y marcas han encontrado inspiración en las tonalidades y texturas que se encuentran en la naturaleza de los hongos. Paletas de sombras de ojos inspiradas en los tonos terrosos y cálidos, esmaltes de uñas que imitan los colores sutiles de las variantes silvestres y productos de maquillaje con texturas aterciopeladas que se asemejan a los relieves del moho están a la orden del día.
Una obra artística de la empresa repostera Frostedhag. Foto extraída en Facebook
Una revolución sostenible
Los hongos ofrecen una alternativa ética y sostenible al cuero animal, ya que se pueden cultivar en condiciones controladas y sin dañar a los animales. Al ser una fuente renovable y biodegradable, los materiales de origen fúngico reducen la huella ambiental de la moda, sin renunciar por ello al lujo o a la calidad. Los materiales derivados de los hongos poseen propiedades únicas que los hacen ideales para su uso en la confección. El micelio, la red de filamentos del hongo, se puede cultivar y manipular para crear una variedad de texturas, densidades y colores. Además, estos materiales son ligeros, flexibles, resistentes al agua y transpirables, lo que los convierte en una opción versátil y cómoda para prendas, accesorios como bolsos y calzado.
Una de las pioneras en introducir el mundo fúngico en sus creaciones ha sido Stella McCartney, quien ha incorporado un bolso hecho con Mylo, un material similar al cuero fabricado con raíces de setas. Más tarde, lanzó un conjunto deportivo hecho con este material. Pero no ha sido la única. Firmas como Adidas o Hermès también han empezado a usar materiales biodegradables hechos con hongos que se transforman en tejidos sostenibles, destacando por su suavidad y flexibilidad, ofreciendo una alternativa más consciente y respetuosa con el medio ambiente. Además, la capacidad de los hongos para degradarse de forma natural al final de su vida útil contribuye a cerrar el ciclo de los materiales y reducir el impacto ambiental.
Por todo ello, la revolución de las setas no ha hecho más que comenzar y estos organismos forman parte del cambio sustentable que se está dando en todo el mundo de la moda. A medida que el sector avanza hacia una industria más ética y respetuosa con el medio ambiente, los hongos están dejando una huella duradera como alternativa innovadora y prometedora.
Fotos cedidas por Pirelli
La belleza femenina ha experimentado un cambio histórico en su concepción y representación a lo largo del tiempo, y en especial en el último medio siglo. Si hablamos de la belleza retratada, el famoso calendario Pirelli se ha convertido en un reflejo palpable de esta transformación al ser un objeto cotidiano que ha desempeñado un papel importante en la representación de la mujer en el mundo de la moda y la fotografía.
Conocido por sus imágenes icónicas y sensuales que decoraban en sus inicios talleres mecánicos, garajes o cabinas de camión, el calendario Pirelli ha evolucionado con el paso del tiempo para reflejar los cambios sociales y culturales en la percepción de la feminidad y el empoderamiento de la mujer. Ahora, la galería FotoNostrum de Barcelona deja al descubierto esta evolución al presentar la mayor retrospectiva jamás realizada del icónico almanaque de la reconocida firma de neumáticos.
La belleza narrada por los mejores fotógrafos
Bajo el título de ‘L’Eterna Bellezza’, la muestra exhibe más de 450 instantáneas capturadas por 41 maestros de la fotografía de moda, quienes han contribuido a hacer del Calendario Pirelli una leyenda en el mundo del arte fotográfico. Maestros como Peter Lindbergh, Annie Leibovitz, Helmut Newton, Herb Ritts, Paolo Roversi, Mario Testino, Steve McCurry, Bruce Weber, Patrick Demarchelier y Richard Avedon, entre otros, retratan a lo largo de los años la sensualidad de las mujeres, entre las que se encuentran modelos como Gisele Bündchen, Naomi Campbell, Cindy Crawford, Gigi Hadid y Kate Moss; actrices como Monica Bellucci, Sofia Loren, Laetitia Casta, Jessica Chastain, Penélope Cruz, Uma Thurman, Kate Winslet y Robin Wright, y cantantes como Cher, Rosalía y Patti Smith.
Más allá de la sensualidad que se hace evidente en algunos casos a través de la desnudez del cuerpo, lo que llama la atención de la exposición es el cambio de la mirada. En este sentido, ‘L’Eterna Bellezza’, amparada por Amadeo M. Turello, comisario italiano y conservador de la Colección Pirelli desde 2015, no ha querido obviar todas las etapas del calendario Pirelli, desde sus inicios en 1964 hasta 2022, a través de imágenes que muestran desde desnudos donde el cuerpo de las modelos se presenta de forma explícita como un reclamo publicitario, así como otras imágenes más evocadoras con mensajes de reivindicación del poder femenino, que van más allá del mero erotismo.
Las imágenes que se muestran no solo desvelan la poética de autores individuales sobre el cuerpo femenino, también constituyen un reflejo de la sociedad, la estética y las artes en los últimos 60 años. Así, la exposición refleja cómo ha evolucionado el lenguaje fotográfico a lo largo del tiempo, poniendo de relieve otros aspectos como la moda y la cultura pop de cada época.
Del objeto al sujeto
El calendario Pirelli se lanzó por primera vez en 1964 y se ha convertido en un símbolo de belleza, estilo y elegancia. Un destacado fotógrafo de la escena londinense, Robert Freeman, quien era amigo personal de The Beatles, recibió el encargo de crear un “calendario hermoso” y tenía total libertad creativa para hacerlo. Este talentoso fotógrafo seleccionó modelos representativas de la época y las llevó a las playas de Mallorca para realizar una sesión alegre e informal que capturara la esencia de aquel momento marcado por una contracultura emergente y la revolución sexual.
En aquellos tiempos, los calendarios con imágenes de mujeres ya existían y se utilizaban como herramienta de marketing en la industria automotriz. Pirelli quería darle una imagen más sofisticada a su célebre almanaque y, en su búsqueda por el buen gusto, se asoció desde el principio con destacados fotógrafos de cada época para que aportaran su visión artística de la belleza femenina. Los primeros calendarios causaron sensación, pero a pesar del cambio, aún reflejaban antiguos estereotipos: las mujeres en actitudes de pin-up exhibían sus cuerpos como objetos de deseo.
A medida que el tiempo avanzaba, Pirelli cambió su enfoque y se adaptó a los nuevos cambios, celebrando valores como la diversidad, el talento, el individualismo y la autenticidad para retratar una belleza que va más allá de lo puramente estético y se centra en la personalidad y la forma de ser de la mujer. En pleno siglo XXI, el calendario Pirelli ha desafiado los cánones tradicionales de belleza y ha captado la esencia de mujeres exitosas en diversos campos, como la música, el cine, la moda, el deporte y el activismo, promoviendo una visión más inclusiva y empoderada de la mujer en la sociedad.
La mujer también como creadora
Las mujeres son las protagonistas absolutas en la historia del calendario Pirelli, pero no siempre han estado en el centro de atención. La marca de neumáticos ha destacado el papel de la mujer como creadora y protagonista en el mundo de la moda y la fotografía, brindando una plataforma para que las fotógrafas expresen su visión artística y talento. Esto ha sido demostrado por fotógrafas como Sarah Moon, Joyce Tenneson y Annie Leibovitz, quien ha trabajado en dos ocasiones para Pirelli.
El último fichaje para la creación del famoso calendario ha sido Emma Summerton, quien se ha inspirado en la figura clásica de la musa para reivindicar el papel de la mujer como creadora. Para la fotógrafa australiana, la concepción de la belleza trasciende los rostros y los cuerpos, y ha otorgado a las modelos que participan en el calendario, como Bella Hadid, Cara Delevingne o Ashley Graham, un rol artístico ligado al poder que representan en la vida real. Así, en un escenario onírico con una gran carga fantástica y precisión ornamental, las “músas de Summerton” se presentan como auténticas guerreras, reinas, activistas o escritoras en la edición 2023 del calendario Pirelli.
Precisamente, algunas de estas imágenes recién salidas del horno también se podrán apreciar en la retrospectiva del calendario Pirelli, que estará abierta al público hasta el próximo 30 de julio en la galería FotoNostrum de Barcelona.
Diversidad e inclusión. Estos son los valores que la plataforma 080 Barcelona Fashion ha querido destacar en su última edición celebrada en el Recinto Modernista de Sant Pau. Y lo ha hecho de forma evidente, reforzando en el cásting de modelos, una amplia pluralidad de cuerpos que no entienden de morfologías, tallas, funcionalidades, edades o pieles que muestran toda su riqueza de color y texturas. Si la moda es un reflejo de la sociedad, la diversidad está en el orden del día, se aprecia visiblemente en la calle y no puede ser tratada como una excepción. Por eso, la pasarela catalana también ha animado a diseñadores y marcas, a ejercer el poder de favorecer este cambio real y, al mismo tiempo, a hacerse cargo de los diferentes desafíos y retos de una sociedad cambiante y diversa.
En esta dirección, la pasarela catalana ha dado un paso más allá al acoger el primer desfile de moda inclusiva en España, a través de la marca Free Form Style. Una iniciativa de sensibilización del Gobierno sobre la neutralidad corporal y la diversidad funcional que se enmarca dentro de un plan de acción para combatir la presión estética. Fundada en 2019 por Marina Vergés y Carolina Asensio, Free Form Style se posiciona como una marca valiente que apuesta por la comodidad sin renunciar a la elegancia. También es pionera en diseñar moda adaptada a personas con diferentes discapacidades con la premisa de dignificar todo tipo de cuerpos porque la moda otorga ese poder de ensoñación y ayuda a fomentar la autoestima de todos los colectivos.
Gratacós colaboró en el desfile de moda inclusiva
En su debut en el 080, Free Form Style se alió con Manuel Bolaño que se encargó de crear todos los diseños de los 16 modelos que desfilaron, entre ellos las atletas paralímpicas Desirée Vila y Sarai Gascón. En esta primera colección, Bolaño estudió cuidadosamente los patrones y los adaptó a las necesidades específicas de cada persona, teniendo en cuenta la diversidad física y las posibles dificultades en el vestir: cremalleras laterales colocadas estratégicamente, aberturas sorprendentes para evitar rozaduras incómodas o pequeños detalles que facilitan la acción de poner y sacar una prenda de ropa.
Gratacós también aportó su granito de arena en esta acción de sensibilización y cedió todos los tejidos a la marca y al diseñador, para que pudieran idear la colección dando rienda a la creatividad para transformar los tejidos en diseños sorprendentes. En la pasarela se mostraron espectaculares Jacquards de cuadros de tonalidades vibrantes, motivos de pata de gallo, encajes, bordados y transparencias que otorgaban sensualidad y también lentejuelas para aportar ese punto de luz que añade vistosidad. Todos estos tejidos se exhibieron en la colección debut ‘Just a perfect day’. Una propuesta que sigue los principios de la sastrería inglesa y está influenciada por los movimientos punk y new romantic, creando piezas funcionales y cómodas para vestir la diversidad, pero sin olvidar la fantasía porque como defiende Free Form Style, “tener una discapacidad no significar no poder ir a la moda”.
Un escaparate especial
Para dar más visibilidad a esta acción y fomentar los diseños expuestos en la pasarela 080, este mes de mayo Gratacós ha dedicado el escaparate de nuestro espacio de Barcelona a la moda inclusiva. Así, nuestros maniquís se vestirán con algunos modelos de la colección debut que Manuel Bolaño ha realizado pensando en las personas con diversidad funcional. Os animamos a visitar nuestro espacio y contemplar de cerca estos diseños que aúnan comodidad con fantasía.