“Gracias Delpozo por estos seis maravillosos años. Me he sentido como en familia, y estoy muy orgulloso de todas las cosas que hicimos juntos”. Esta es la frase de despedida que Josep Font dejó el pasado martes en su Instagram, tras seis años al frente de la dirección artística de la firma. Delpozo por su parte, agradecía casi al mismo tiempo su excelente labor durante estos años. Un intercambio de agradecimientos que pone fin a una fructífera colaboración con éxito.
Josep Font ha sido el encargado de “rejuvenecer y continuar el legado de Jesús (del Pozo)”, según afirmaba Pedro Trolez, presidente de Grupo Perfumes y Diseño, propietario de la casa, haciendo de la marca española una de las más deseadas a nivel internacional. “Tiene una capacidad extraordinaria de mezclar colores, texturas y volúmenes, convirtiéndolos en colecciones delicadas y femeninas. Estoy agradecido por su lealtad y por haber formado parte de esta primera etapa de Delpozo”, añadía Trolez.
Arquitecto de formación, Josep Font se unió al proyecto de Delopozo un año después del fallecimiento de Jesús del Pozo, firma que se fundó en 1974. En estos seis años, Font ha sido el responsable de renovar la identidad de la mujer Delpozo y darle una proyección mundial al desfilar a Nueva York y después a Londres, presentando los dos últimos desfiles. Más allá de la reformulación del nombre (Jesús del Pozo, pasó a llamarse DelPozo) con fines comerciales, el modisto catalán ideó un lenguaje propio inspirado en las formas de la naturaleza para crear voluminosos diseños etéreos y delicados en una paleta muy colorida caracterizada por sus magníficos contrastes: baila entre los tonos pastel más oníricos y los tonos más saturados.
Más allá de la naturaleza, el diseñador también ha bebido del arte, la música y la arquitectura para idear cada nueva colección. Cada cual más sorprendente y aplaudida. Apasionado de la artesanía, Font también ha apostado por los bordados de calidad reclutando personal adecuado para trabajar en su taller. Una tarea que avala esa minuciosidad por el detalle y los acabados en prendas más cercanas a la Alta Costura que al prêt-à-porter en una visión incomparable del armario femenino. Por todo ello, Josep Font ha puesto en valor las piezas bien hechas, la moda cocinada a fuego lento, las siluetas arquitectónicas, el tul, los volúmenes etéreos y el buen gusto sin excesos. Todo ello a través de Delpozo.
De momento, desde Delpozo no han dado pistas de quién será el creativo que cogerá el relievo de Josep Font al frente de la dirección artística. Tampoco se sabe cuál será el siguiente paso a dar por el diseñador catalán que ha conseguido hacer soñar a las mujeres privilegiadas que se han podido vestir de Delpozo en la era de Josep Font.